El Gobierno anunció aumentos en tarifas de luz y gas

Kicillof los presentó como "cambios tarifarios". Serán cargos fijos de entre 4 y 150 pesos para la luz y de entre 4 y 60 pesos para el gas. El viceministro justificó la suba en la boleta de la luz por el retraso de Buenos Aires con respecto a otras provincias. Dijo que será usado para dos fondos de "desarrollo energético".

Detalle de los aumentos en luz (Capital Federal y Gran Buenos Aires) y gas en función de los consumos (Fuente: Ministerio de Planificación)

El ministro de Planificación, Julio de Vido, y el viceministro de Economía, Axel Kicillof, anunciaron hoy subas en las facturas de luz para los usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires y de gas para todo el país. El encargado de dar la noticia, que rige para las facturas a partir del 1 de noviembre, fue el poderoso segundo del Palacio de Hacienda, quien lo presentó como un "reajuste tarifario". Técnicamente, se tratará de cargos fijos que irán de 4 a 150 pesos, aunque según los funcionarios, la inmensa mayoría de los usuarios sufrirán aumentos mínimos.

El ajuste llega un año después de que el mismo Gobierno anunciara un plan progresivo de quita de subsidios que sólo llegó a aplicarse en su primera fase. Como aquella vez, el argumento para justificar la suba de luz fue que en el área metropolitana se pagan tarifas mucho más bajas que en otras zonas del país o en otros países de la región. Según Kicillof, los aumentos servirán para extender las redes de luz y gas.

Las viviendas de Capital Federal y el Gran Buenos Aires con consumos de electricidad inferiores a 300 kilowatts por bimestre pagarán 4 pesos más por factura. Las que estén en la franja de entre 300 y 650 kilowatts pagarán cada dos meses un extra de 10 pesos sobre su boleta actual. El máximo será de 150 pesos extra por bimestre y alcanzará al 0,4% de los hogares con mayores consumos eléctricos. Son los detalles que dio el ministro de Planificación, Julio De vido, en conferencia conjunta esta mañana con el viceministro de Economía, Axel Kicillof.

No se trata de un ajuste de tarifas sino de un aumento en el precio de la boleta, porque la recaudación adicional no irá a las arcas de las empresas energéticas sino a un fondo nacional de desarrollo energético.  De acuerdo con De Vido, las cifras son "irrelevantes para cualquiera de los bolsillos" y los hogares con consumos inferiores a 650 kilowatts representan al 72% de la zona. También habló de un registro de excepciones en el que ya hay 600 mil usuarios y en el que puede inscribirse el que demuestre que no puede hacer frente al pago.

De Vido también adelantó detalles sobre los aumentos de gas, en este caso, para los hogares de todo el país: $4 por bimestre para los de consumo anual inferior a 500 metros cúbicos; $5 para los de consumos comprendidos entre 501 y 650 metros cúbicos; $6,5 para la franja de entre 650 y 800 metros cúbicos; $8,5 para los consumos anuales de entre 800 y 1000 metros cubicos. Para los hogares de mayor consumo, el costo extraordinario de su boleta bimestral de gas será de 60 pesos.

Un poco antes, el viceministro de Economía, Axel Kicillof, había anticipado que habría "cambios tarifarios" en materia de gas y electricidad para financiar la conformación de un "fondo de desarrollo energético". "Estamos generando un marco donde el sector privado se pueda desarrollar como lo viene haciendo", dijo durante una conferencia de prensa en el Ministerio de Economía. "Se van a hacer algunos cambios tarifarios (en gas y electricidad) que van a estar destinados íntegramente a los fondos para el desarrollo" de redes de esos sectores.

En referencia a las recientes críticas contra el Gobierno por el impuesto a las Ganancias, Kicillof dijo que subsidiar las tarifas de luz y gas también podía entenderse como "una política salarial" porque, sostuvo, permiten que el consumidor tenga más recursos para destinar al consumo. "Cuando se habla de los impuestos que paga el trabajador, también hablemos de los beneficios que percibe cuando paga los impuestos", agregó.

Según el viceministro, una familia en el área metropolitana paga tarifas de luz y gas equivalentes al 0,5% de su salario, mientras que en Córdoba el porcentaje sube a 4%, en Chile al 3%, en Brasil al 6% y en Uruguay al 12%.

Kicillof justificó la política energética del Gobierno como "un marco donde el sector privado se va a poder desarrollar con más ímpetu": "Vamos a avanzar con el marco regulatorio (...) Venimos de uno que permitía el saqueo del sector y no estaba puesto al servicio de los argentinos".